Project Description

El canal del Saltador se construyó durante los años 1989 – 1991, con una longitud de 9.5 km, de los cuales los últimos 5.236 km discurren por la Rambla del Saltador hasta llegar a la cola del embalse de Cuevas del Almanzora.

Tras varios daños producidos por fenómenos naturales afectando gravemente a dicho canal tras presentarnos al concurso público en colaboración con la empresa SANDO, nos fue adjudicado uno de los lotes de la ejecución de una conducción para asegurar el abastecimiento y riego en la zona de la comarca del Almanzora comprendida entre La rambla de El Saltador y El embalse del Almanzora.

La obra consistió en la ejecución de una tubería de acero al carbono soldada helicoidalmente en toda la traza  de gran diámetro (1600 mm). El discurso de la propia traza resulto bastante complejo por la orografía del terreno, presentando puntos altamente difíciles de resolver.

En el año 2012 la conocida riada de San Wenceslao del 28 de septiembre causa graves daños en las infraestructuras y campos de la Comarca del Bajo Almanzora. Entre las infraestructuras afectadas de la zona, quedó inutilizado el Canal de El Saltador, un canal en hormigón que conecta el enlace Trasvase Negratín y Trasvase Tajo Segura, situado en la pedanía de El Saltador de Huércal-Overa, con el embalse de Cuevas del Almanzora. El fin de esta infraestructura es el de transportar el agua procedente de otras cuencas hasta el citado embalse para garantizar el abastecimiento y riego de la Comarca del Bajo Almanzora.

Tras las afecciones producidas, se proyecta como obra de emergencia  una conducción de 18 km para trasvasar por gravedad el agua proveniente de las cuencas del Negratín, Tajo y Segura desde El Saltador hasta la Etap Bajo Almanzora situada junto a la presa de Cuevas del Almanzora. Tras un concurso público a Servicios Técnicos Napal S.L se le adjudica uno de los tramos en colaboración con la empresa Sando Contrcucciones .

La obra se divide en tres tramos con diferentes diámetros de conducción, de los cuales a Servicios Técnicos Napal y a Sando Contrucciones  se le adjudica el  Tramo 2 con una longitud de 4,8 km.

La conducción ejecutada tiene un diámetro de 1600 mm y es de acero al carbono soldado helicoidalmente con un rcubrimiento de poliuretano.

Por tratarse de una obra de emergencia la participación de Servicios Técnicos Napal y  Sando Contrucciones  no estuvo limitada a la construcción, si no que tuvo un elevado porcentaje de participación en el diseño y proyecto de la obra.

El trazado de la nueva conducción se proyectó alejado de la rambla por la que discurría el canal, con el fin de evitar riesgos de futuras avenidas. El encaje del trazado por la accidentada orografía colindante a la Rambla del El Saltador conllevó un perfil de la tubería plagado de un sinfín de subes y bajas que generó una cuantía significativa de colocación de ventosas y desagües.

Hubo que realizar movimientos de tierra de una importante entidad y dificultad para generar en las escarpadas laderas de la zona, una plataforma que permitiera el acceso y trabajo de maquinaria pesada. Cabe destacar en el trazado, fruto de la abrupta orografía, el sifón en el Pk 1+100 en el que existía un desnivel a salvar de 40 metros de altura en 190 metros de longitud y la excavación de la trinchera en el Pk 2+100 con un talud en torno a los 20 metros de altura.

Como elementos singulares de la conducción en el Tramo 2 destaca la colocación de una válvula de mariposa en diámetro 1.600 mm al principio del mismo y la salida de un ramal en diámetro 700 mm al final del tramo para conectar con las conducciones de regadío de Huércal-Overa.

En dicho ramal se instaló una válvula de mariposa en diámetro 700 mm, una válvula reguladora de presión de diámetro 500 mm y un caudalímetro en diámetro 500 mm para el control del paso del agua

Se realizó un exhaustivo control de calidad en los procesos constructivos desde principio hasta el final. Los numerosos codos que se instalaron en la conducción fueron ejecutados en obra con unas calidades de ejecución similares a las alcanzadas en taller. Además aboslutamente todas las soldaduras de codos fueron radiografiadas a pie de tajo.

Las casi 400 soldaduras entre campanas de los tubos realizadas en su interior se revisaron por el método de líquidos penetrantes.

Se prestó también mucha importancia a la pintura de recubrimiento que traían los tubos así como a los recubrimientos realizados en obra en las zonas de soldadura, realizándose un escrupuloso control tanto de espesor de recubrimiento, como de resistencia de la pintura a impactos y arrancamientos.

No menos importante fueron los controles de compactación de los rellenos de las zanjas y de los hormigones empleados en las construcciones de arquetas auxiliares de los elementos de la conducción.

La obra culminó con la realización de la protección catódica de la conducción. Dado el carácter de emergencia se habilitó un amplio despliegue de medios que permitió acometer los trabajos en un periodo de 6 meses de ejecución.